Jane Packer Flowers es el nombre de la casa de arreglos florales más importante que hoy en día existe en Inglaterra y que se ha extendido a varios países.
Su fundadora fue una mujer muy trabajadora, que supo transformar el antiguo arte de los arreglos florales, en un arte novedoso y actual. A puro sacrificio logró posicionar su nombre a la par de las primeras marcas de la moda, pero… ¿cómo lo hizo?
Jane Packer todavía iba a la escuela cuando comenzó a trabajar los días sábados en una floristería cercana a su casa, en la zona de Grays, Inglaterra. Si bien, el sueldo que ganaba no era demasiado, obtenía una de las ventajas más grandes que puede aportar un trabajo: el aprendizaje.
El Padre Rico de Robert Kiyosaki siempre le advertía:
“Busca un trabajo para aprender, no para ganar dinero”.
Al finalizar la escuela, Jane comenzó a trabajar a tiempo completo como florista en aquella tienda. Decidida a aprender más sobre aquel oficio, resuelve viajar a Londres para hacer un curso de floristería. Cuenta que a partir de entonces comenzó a investigar acerca de la gran cantidad de flores que había, la posibilidad de sus combinaciones y que se trataba de un verdadero arte. Descubrió también que el rubro le ofrecía grandes posibilidades de poner en marcha su inspiración y creatividad.
Se muda a Londres y comienza a trabajar como florista en un Hotel de la zona. No pasó demasiado tiempo cuando a sus 22 años de edad, decidió alquilar una tienda para empezar a montar su propio negocio.
Jane Packer cuenta que los primeros años fueron de grandes sacrificios. Trabajaba la semana completa, se levantaba de madrugada para buscar las flores frescas en el mercado y continuaba trabajando hasta la noche.
Profundamente conectada con su trabajo, poco a poco comenzó a diferenciarse, dándole su toque personal a todo lo que hacía. Hizo a un lado las clásicas flores, y comenzó a ofrecer alternativas de arreglos campestres y rústicos. Ella misma encargaba especialmente las flores poco convencionales, en su tienda se podía encontrar un ramo de girasoles en lugar de las clásicas rosas rojas por ejemplo. Buscaba diferenciarse.
Consolidada su creatividad y su estilo personal, las ventas empezaron a aumentar, pero como todavía el negocio no le traía grandes ganancias, no podía invertir en publicidad para promocionarse.
Se le ocurrió entonces acercar sus diseños a las revistas de moda, a los hoteles y restaurantes, que instantáneamente quedaron maravillados con su arte novedoso y exclusivo.
Esta actitud fue fundamental. Jane de alguna manera estaba poniendo en práctica lo que Robert Kiyosaki aconsejó en su Libro:
“No es suficiente tener un gran talento, hay que aprender a venderlo”.
Jane Packer Flowers se transformó en una verdadera marca. Sus diseños se convirtieron en colecciones de moda apareciendo junto a marcas líderes de primer nivel como Armani, Vogue, etc.
Debido a que muchas personas se le acercaban para preguntarle cómo armaba sus diseños, se le ocurrió extender (apalancar) su negocio formando su propia escuela de floristería. El éxito fue inmediato, Jane se convirtió en una verdadera empresaria y recibió propuestas para extender su marca internacionalmente. Así fue como abrió sucursales en Japón, Nueva York, Corea y Reino Unido.
Al día de hoy, se estima que la suma de negocio ronda en poco más de doce millones de dólares. Recientemente sus ramos fueron escogidos para homenajear a los campeones de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Y todo empezó con una adolescente, que simplemente se le ocurrió ofrecer las flores de un modo diferente.
¿Qué te impide replicar los mismos conceptos de Jane Packer Flowers en un negocio propio? ¿Cuáles crees que fueron las claves para tan notable éxito?
Anima a otros compartiendo esta historia y deja tu comentario.
Te saluda,
Martín Omar
Hola Martin, excelente historia, es interesante que desde un negocio que todos podríamos verlo como común lo hayan llevado a un nivel de élite.
Yo también estoy comenzando con un negocio propio, es de venta de ropa, básicamente viajo a un país vecino, compro ropa BBB (buena, bonita y barata) y la vendo aquí en mi ciudad. La primera experiencia la hice pensando no en ganar dinero en sí, ni pensando que estaba levantando un negocio, sino pensando en que me estaba pagando un curso de marketing, comercio y ventas, así me tomaba un poco más liviano el miedo a perder y lo tomaba como una lección de vida. La primera experiencia me ha servido de mucho, afortunadamente ninguna de las ventas que hice directamente me ha quedado mal con los pagos, tengo una vendedora freelance que me ha ayudado, y me han aparecido un par de benditos problemas (benditos, porque considero que puedo aprender de ellos, aunque aun no tengo la solución exacta, pero se que cuando la encuentre me abrirá otras perspectivas del negocio).
Quisiera saber que me pueden aconcejar con esos problemas. El primero es que a pesar de haber tratado de ser cuidadoso con la administración de los pagos que me hacían, -no gastaba ese dinero, sino que lo depositaba a mi cuenta-, en determinado punto todo ese dinero se terminó confundiendo con el ingreso de mi empleo y al final de cuentas tuve que sentarme a cuadrar números para saber cuánto mismo había ganado (sí, sé que suena bobo, pero me emocioné tanto vendiendo que me despreocupé de la contabilidad), creo que eso lo solucionaré mejorando mi gestión de contabilidad, y abriendo una cuenta bancaria a parte. El segundo problema es que aun no se como montar una línea de distribución óptima de la ropa, ya que no quiero desgastarme haciendo todo yo mismo (viajar, traer la ropa, venderla y hacer las cobranzas), no lo veo óptimo, aunque he comenzado con la vendedora freelance, aun no estoy muy al tanto de como manejarla adecuadamente como para tener más vendedores en ese estilo (como garantizar que no se van a robar la ropa, que porcentaje sería el más apropiado, que perfil debo buscar como para poder reclutar a cualquier persona para que venda aunque antes no se haya dedicado a eso). Y el tercero es que aún no estoy muy cómodo haciendo la venta de ropa dando crédito directo, aunque por lo que me he dado cuenta de esa manera es más fácil vender, lo que me asusta es la gestión de las cobranzas, no tengo ni idea de como hacerla en casos de que alguien me quede mal con los pagos, aunque por suerte eso no ha pasado hasta ahora.
Les agradezco sus sugerencias y observaciones y a ti Martín por darnos este lugar donde aprender de esto que nadie nos lo enseñó, que es como ser emprendedores.
Una correcta actitud: “La primera experiencia la hice pensando no en ganar dinero en sí, ni pensando que estaba levantando un negocio, sino pensando en que me estaba pagando un curso de marketing, comercio y ventas, así me tomaba un poco más liviano el miedo a perder y lo tomaba como una lección de vida”.
El miedo a perder dinero y el desconocimiento paralizan, quizás si lo hubieras tomado como un negocio no hubieras iniciado aún por el miedo a perder, pero como es una prueba y lo ves como una experiencia que puede enseñarte mucho, ya lo encaminaste y hasta tuviste resultados positivos.
Lo que te pasó con el tema de la contabilidad yo no diría que es algo bobo, es de lo más normal, suele pasar, pero fijate que aprendiste la lección de lo importante que es mantener en orden los números, y esa lección fue a costo cero. Ahora quizás no sepas bien cuánto ganaste, cuanto dinero retiraste, etc., pero esto es mejor aprenderlo ahora que estás iniciando.
1) Nunca tenés que mezclar nunca tu dinero personal con el dinero del negocio, es mejor mantenerlo hasta físicamente separado, sino se cae en los vicios de “saco un poco de cambio de la caja del” o peor aún, “tomo un poco del dinero de la caja del negocio prestado y después lo repongo”. Si hacés esto después no te cierran las cuentas.
2) Cuando los números te confundan, tenés que utilizar el recurso de la sencillez extrema, aunque sea con métodos poco convencionales (al menos al principio que es algo informal). Si se te dan bien las planillas de cálculos en la computadora, podrías utilizarlas, sino, el viejo y querido papel y lápiz, pero manejado como una planilla, con columnas, como podría ser: fecha, código, ingreso, egreso, notas.
• Fecha: el día en que se realizó el movimiento. Con movimiento me refiero a cualquier tipo de operación que hizo ingresar o salir dinero, de la caja de tu negocio.
• Código: podés tener distintos códigos para identificar distintas cosas. Por ejemplo, cada prenda puede tener un código tuyo, un código interno, letras y números podría ser, es solo para identificarla (R-A-M-1234), tiene que ser algo corto. Entonces cuando vendés una prenda, en la planilla ponés la fecha, el código de esa prenda, el ingreso en un número positivo, y la nota que amplía un poco la operación: “remera amarilla talle medio estampada”.
Si te fijás, en el mismo código ya armé algo que identifique al producto:
• R = remera.
• A= amarilla.
• M= talle medio.
• 1234= un número único para ese producto.
3) El gran trabajo de números, está al comprar los productos. Tenés que tener prolijidad extrema, tomar nota al momento del costó cada prenda y ponerle en la etiqueta de la prenda ese código. Volcar todo eso a una planilla, que tenga columnas similares a estas: fecha compra, fecha de venta, código, precio de compra, precio de venta, notas.
4) Es bueno separar las planillas, para mantener un orden y priorizar la sencillez. Podés armarte otra para la consignación de producto, con pocas columnas y muy claras:
• Fecha: la fecha en que le entregaste en mano el producto.
• Código: el código del producto,
• Persona: nombre de la persona que vende para vos, a quien le entregaste la prenda.
• Pagado: solo completás SÍ o NO.
• Notas: cualquier tipo de información adicional.
5) Otras formas de control.
Podrías entregarle a cada freelance una planilla similar para que ella misma pueda llevar sus cuentas y ganancias. Otra planilla más podría ser para los deudores, para llevar el control de los clientes que deben dinero.
Al momento de adquirir productos, te sería de utilidad tener una carpeta con tarjetas de los lugares donde adquirís productos, con notas, con facturas (tickets) divididos por cada uno de estos negocios, entonces mantenés bien clasificada toda la información desde el momento en que realizás la compra o mismo antes, desde el momento en el que buscás proveedores.
Todos los gastos de viaje y costos adicionales también deberían figurar como un egreso, porque es parte del negocio.
Por el tema de todo el circuito del negocio, yo creo que sería importante al menos al principio que puedas hacer todo por un tiempo, porque necesitás profundizar en el negocio, conocerlo a fondo, sacar el perfil de las personas adecuadas para la venta, el perfil de los clientes, hacer bien los números para ver si conviene o no dar en cuotas porque que vendas más no quiere decir que sea más rentable, quizás te das cuenta que con las pérdidas de dinero de las personas incobrables no te conviene, o al revés, quizás sí te conviene, y no te hacés tanto problema si de tanto en tanto alguien no paga. Tené en cuenta que este tema de dar o no en cuotas no tiene que ser un asunto de “sensaciones”, sino de números puros. Los e-commerce, las tiendas online, saben que un 1% de sus transacciones van a ser fraude y nunca las van a cobrar, pero lo tienen contemplado y no les interesa porque se lo suman al costo de todos los productos.
Creo que primeramente estudiaría a fondo los perfiles de vendedores (tus freelances) y de compradores, esto es a ojo, vos vas a tener que ir entrenándote en la selección de personas. Luego establecería sistemas por ejemplo de entrenamiento para los vendedores, y reuniones para ver los problemas en común y las sugerencias que estas mismas personas te van a dar por tener contacto con los clientes a diario. Establecería premios por objetivos, etc. como suelen hacer las empresas de venta directa. Tu ganancia fuerte está en entrenar personas (más que dedicarte a vender vos), eso es apalancar tu tiempo.
Lo productos a los vendedores nuevos se los daría de a poco, cada persona se tendrá que ir ganando tu confianza, inclusive podrías probar de cobrar el 50% de lo que le dejás la primera vez y luego se lo vas liberando a medida que te pide más y te genera ganancia (lo que te daría dinero en efectivo rápido).
De las compras creo que es mejor que por el momento te encargues vos, no creo que quieras andar divulgando mucho tus mejores proveedores.
Bueno Daniel, espero que estos aportes te sirvan, y mantenenos al tanto de los avances de tu proyecto.
Saludos,
Martín Omar.
Muchas gracias por tus valiosas observaciones, voy a tener en cuenta todo esto que me indicas y esta semana comienzo con la segunda tanda, y vamos avanzando.
A nuestra amiga la llevo hasta donde esta, la VISION. Y ademas pienso que esa fue su motor; nunca se quedo inmovil, trascendio y esa actitud es de personas que tienen VISION.
Bueno es cuestionarse asi mismo, para saber de qué se es capaz.
Sin olvidar que comenzar es duro y que requiere constancia.
Gracias Omar por lo que nos regalas.!!
CUESTIONARNOS!!!
sin duda siempre mantuvo su perseverancia, que es el elemento mas fuerte de todo emprendedor.
gracias por esa historia tan inspiradora que nos enseña que debemos ser fuerte y perseverante en nuestros proyectos
ME ENCANTA INICIAR MI DIA APRENDIENDO «GRACIAS»
Una historia muy buena ya que nos enseña que ejercitar nuestra mente y poner a trabajar nuestro cerebro es una de las ventajas mas importantes que tenemos, si logramos activar nuestra creatividad es seguro que pronto se nos ocurrirá una muy buena idea.
Muchas gracias.
Excelente historia de Jane para seguir su ejemplo, » ella aprendió a vender su gran talento » SABER ES PODER. Saludos cordiales .
Hola martin
soy maria la del carwash fijate martin q todo lo q me dices lo he evaluado y me va servir de mucho solo quiero comentarte que nosotras atendemos el carwash hoy en dia tenemos un pequeño problema la gente cree q por lavar su carro se les cobrara el parqueo y pusimos un rotulo por el lavado de su vehiculo 1 hora de parqueo gratis hemos evaluado y analizamos porque de todos los carros que lavamos solo ha regresado un cliente y los otros no ni siquiera fijate q cartel q ponemos cartel q nos roban lo rompen ha funcionado un poco pero ahora ya llevamos 3 dias en q ningun carro entra sera por nuestra falta de experiencia nuestra lentitud en el lavado hay otros carwash q si lavan carros para decirte q a nosotros solo nos entran 2 carro y es que no sabemos q hacer hay dias en q queremos cerrar el carwash mi socia y yo no hayamos una salida y nuestra inversion se nos esta iendo de las manos ya casi se nos acaban nuestros recursos dicen.
María, sinceramente no creo que tengan un pequeño problema, sino un problema gigante y este gran problema, no es tanto que los clientes no entren o no regresen, el problema más grande que tienen es que son las dueñas del negocio y no saben por qué sus clientes o posibles clientes se comportan de esa manera. Eso es una gran falta y ustedes son las únicas responsables de este tema porque deberían ser las personas más interesadas en llegar al fondo del asunto.
Hoy no tienen un jefe, pero el negocio en sí es el jefe más cruel y les va a cobrar peor que el peor de los jefes, va a hacer que vayan a la quiebra por no estudiar la situación hasta llegar al fondo del asunto.
Por lo tanto, yo creo que deberían de forma URGENTE conseguir la respuesta a estas interrogantes:
¿Por qué mis clientes no regresan?
¿Por qué no ingresan más clientes?
Si no saben la respuesta a estas preguntas, lamento decirles que el futuro del carwash es oscuro. Y cuando me refiero a CONSEGUIR las respuestas no me refiero a que “supongan” cuáles pueden ser las respuestas, sino que realmente averigüen lo que opinan las personas que fueron clientes y las que prefieren lavar su auto en otro lado.
Si les roban los carteles de promoción, o se los rompen, tienen todo el día para pensar una forma para que eso ya no pase, ¿qué hacen mientras no lavan autos?, corroboren, piensen, promocionen, solo a eso se tienen que dedicar, a corroborar qué es lo que los clientes o posibles clientes piensan de su negocio, a pensar en formas de revertir las cosas malas que las personas ven de su negocio y a promocionar más el lugar a bajo costo.
Están como mirando la película de que el negocio no camina y en realidad ustedes son las que tienen que hacer que el negocio funcione, no pueden decir “la gente no viene, no sabemos por qué”, tienen que dedicarse de lleno a saber por qué la gente no viene. La diferencia es que una es una frase casi de resignación y la otra es una frase de acción. Si quieren realmente sacar adelante el negocio, primero deberían ponerse de acuerdo si van a ir con esto a fondo, porque a medias no creo que sirva de mucho. Obtengan las respuestas necesarias para saber puntualmente los puntos flacos del negocio y así van a poder cambiarlos.
En otra circunstancia seguramente les daría una palabra más alentadora, pero creo que dada la situación esto es lo que más les puede ayudar, es una especie de sacudida para que reaccionen en buscar esas respuestas vitales para la toma de decisiones y para que el negocio sobreviva. Las felicito por su osadía de intentar un negocio, pero como verán eso no es suficiente para sacarlo adelante, tienen que meterse más a fondo y muy rápido.
Saludos,
Martín Omar
mira MARTIN leyendo tu punto de vista acerca del negocio de cashwear la verdad no sabia ni conocía todas estas preguntas tan importantes que hay que tener en cuenta en la apertura de un negocio quizá algunos estén diciendo que esto es demasiado trabajo pero pienso que de no ser así los problemas y dificultades que se pueden tener pueden ser un verdadero dolor de cabeza que bueno lo que aprendido hoy
Muchas gracias por el comentario Jeison.
Me pone muy contento el hecho de saber que de alguna forma estoy haciendo lo que otras personas hicieron por mí, ayudando a ampliar un poco el contexto, es como devolver un poco de lo que la vida me va dando.
Saludos,
Martín Omar
Buen dia martin
Le cuento tengo un mes de ignaurar un carwash que ya estubo funcionando antes con dos administraciones pero lo quitaron que puedo realizar para diferenciarme de los demas ya que solo sabemos realizar el lavado y aspirado somos mujeres las que atendemos y mi familia esta en desacuerdo no sale mucha ganancia solo para cubrir gastos estamos en el interior de un parqueo frente a un banco me puede ayudar gracias
María, partiendo de lo que me comentás, que dos administraciones lo quitaron, que no da ganancia y que tu familia no estaba de acuerdo seguramente por estos temas, mi pregunta es: ¿Cómo tomaron un negocio en ese estado y con esos antecedentes sin antes tener la respuesta a la pregunta que me estás haciendo?
Seguramente el negocio tiene muy poco margen de ganancia, y los administradores anteriores también se habrán percatado de esto. Aunque puede que hayan manejado mal el negocio, no descartemos esa posibilidad.
Para hacerse cargo de un negocio bajo estas sospechas, lo primero que tengo que hacer es conocer bien los números reales del negocio y tener bien en claro la estrategia para diferenciarme de la competencia y aumentar en gran manera las ventas, y de forma rápida, es decir, que la respuesta a la pregunta que me estás haciendo es lo que más deberían haber tenido en claro antes de tomar el proyecto.
Me gustaría que si piensan distinto me argumentaran su parecer.
Desde ya les digo que mi deseo es que les vaya muy bien, pero no podía dejar de aclararles primeramente lo anterior que sonó muy raro.
Ahora, digamos que “si ya estamos en el baile, hay que bailar”. Se hicieron cargo del negocio y hay que revertir los números.
Algunas preguntas para que se hagan:
• ¿Llevan un detalle de todos los gastos y de todos los ingresos?
• ¿Saben los porcentajes de ganancia que les deja cada una de las actividades que realizan en el lugar?
• ¿Todas dejan ganancias?
• ¿Hicieron una encuesta entre sus clientes para saber qué podrían mejorar, qué puntuación del 1 al 10 le dan a sus servicios, qué creen que su establecimiento tiene que otros no y qué creen que otros tienen que ustedes no?
• ¿Saben cómo están en precio en relación a la competencia?
• ¿Tienen los emails y teléfonos de cada uno de sus clientes?
• ¿Saben exactamente cuántos lavados hace cada uno de sus clientes, un promedio general también?
• ¿Probaron ofrecer un abono trimestral o anual con descuentos por pre pagarlo y beneficios especiales? (Si van a hacer esto hagan un testeo con unos pocos clientes primeramente).
• ¿Probaron hacer una alianza con el banco que está en frente? Comuníquense con el sector de recursos humanos y el de marketing para brindarles “beneficios para empleados del banco, X% de descuento en el lavado de su auto”. Inclusive si contratan un abono trimestral, pueden lavarles el auto donde lo dejen estacionado (una persona se hizo millonario ofreciendo este servicio con carritos móviles, tenía arreglos con cadenas de supermercados y similares).
• ¿Brindan «seguro por lluvia» y ese tipo de beneficios?
• Si llevo mi auto a lavar a tu negocio, ¿qué hacen para hacerme sentir especial?
Hay mil cosas por hacer, por ejemplo, si saben que X cliente lleva el auto a lavar una vez por mes, podrían preguntarle por qué lava el auto con ese nivel de periodicidad y qué le molesta de tener que llevar el auto a lavar, y qué le gusta. Entonces teniendo ese tipo de información, pueden ofrecerle un abono trimestral para lavar el auto hasta 3 veces por mes por el precio de 2 además de otros beneficios exclusivos.
Ustedes también pueden hacer un acuerdo con otras empresas para que les den beneficios para sus clientes, a cambio de publicidad. Por ejemplo, con algunos seguros pueden negociar descuentos especiales para sus clientes. Si llegan a tener una base de datos considerables de emails, nombre de la persona, marca de auto y modelo, pueden negociar más cosas.
Se pueden hacer mil cosas, básicamente, traten de conocer a fondo a sus clientes, medir todo, llevar los números muy de cerca, buscar ideas que les generen valor a sus clientes, y cerrar arreglos con otras empresas / personas / negocios para que les envíen nuevos clientes, cuanto más masivas sean estas acciones mejor, y muy importante: que todo esto sea a un costo bajísimo. Utilicen su creatividad y no caigan en salidas fáciles pero burdas como poner a atender chicas con ropas ajustadas y provocativas para llamar la atención.
Saludos,
Martín Omar